Sin miedos.

Imagen de Merche.
Merche.
10 Febrero 2019

Ha cambiado algo, algo importante. Ya no hablo de intentos, como tantas veces fallidas. Ya no digo "creo que si" o "tal vez esta es la definitiva" No... Siento como si hubiera crecido en este aspecto, he recaído muchas veces y de todas ellas aprendí algo, he reunido todas esas experiencias y las estoy utilizando a mi favor, considerando y entendiendo los por qué. 

He entendido que sola no podía y acepté tener que ir al médico y dejarme orientar. Seguir las pautas, usar el tratamiento de los parches de nicotina y unas pastillas para estar más tranquila. Ha sido un acierto, me siento bien, no me puedo quejar en comparación con otras ocasiones de "intentos".

No voy a contar los días que no fumo (la fecha está cambiada), yo, que me descargaba una aplicación y vivía constantemente mirándola, viendo mis progresos, ya nada, de lo que me estoy ocupando  es de los sentimientos que me produce la abstinencia. De lo que me ocupo a conciencia es de mi bienestar, de qué hacer para sentirme mejor cuando me saturo. 

No estoy dejando el tabaco, ni dejando nada esta vez. 

Así me veo, me veo que estoy enferma de un hábito que he tenido más de la mitad de mi vida que me supondrá otras enfermedades y seguramente incurables. Esto si me da tristeza. 

Asi que no lucho contra nada, pacto con las emociones y sentimientos para curarme lo más pronto posible. Con optimismo, sin dramas y penas que utilizaba antes. Estoy orgullosa de mí porque tengo la certeza de que lo más importante  es el enfoque, el orgullo de creer en mí misma, el compromiso, la responsabilidad.