Diario de Vic_

Hoy he tenido un mal día, uno de esos en los que mejor no levantarse, uno malo-malo, no un poquito malo, no... he llegado a casa con lo que supongo que era un ataque de ansiedad y apenas he comido de la llorera que me ha entrado y sigo hecha polvo. Ironías de la vida, hoy día de la mujer trabajadora, mi novio me ha sugerido redactar mi carta de dimisión. Cada día me armo de infinita paciencia lidiando con un proyecto en el que me caen palos por todas partes y me aparecen marrones debajo de las piedras.

¡Hoy he hecho 4 meses! Menos mal que no fue el día 29 o ya nunca los haría este febrero, jeje.

Hoy me ha dicho una compañera cuando iba a pasar por el corrillo de fumadores de mi curro que fumaban a menos 3 grados en la puerta: "corre, corre, que no te de envidia". Y le he dicho que envidia ninguna, que con este frío ya ves qué placer. Hoy es martes. Llevaba tres días sin acordarme. El sábado me acordé en el curso, me salí a fumar con el profe pero tranquis, que no fumé. Me acordé con morriña, pero más que del tabaco, de otra vida que he dejado atrás. Estoy negativa y triste últimamente, pero no es el tabaco.

Ayer me acordé del tabaco y después de tres meses y medio todavía hubo momentos en los que me hubiera fumado un cigarro. Tuve una comida estupenda en un sitio precioso y cuando mi chico y yo ya estábamos a punto de reventar tomándonos un pacharán, me dijo: "nos falta el puro". Lo dijo de broma y sin mala intención, pero aunque yo nunca he sido de puros y puritos, se me apeteció un cigarro de manera loca. El momento pasó y ya está, pero no se puede bajar la guardia.

Ya he pasado la barrera de los tres meses y me he dado cuenta de que ahora es bastante más difícil escribir sobre esto o leer experiencias de otras personas en este punto porque imagino que a todos nos pasa igual. Ha dejado de ser algo nuevo sobre lo que haya mucho que decir. Durante la semana no m acuerdo apenas, por ejemplo, me voy a trabajar sin un sólo pensamiento sobre el tabaco. No pienso en ello en toda la mañana hasta la hora de comer en que leo un poco el foro, pero sin ataque de mono ni nada. Simplemente me acuerdo.

Mañana por la mañana haré 3 meses. Lo cierto es que sigo igual: la mayor parte de tiempo no me acuerdo, pero en momentos puntuales tengo la sensación de que volver a fumar es facilísimo. Que podría fumarme un cigarro y echar a perder todo el trabajo y lo curioso es que no tengo ya ataques de mono. Ni siquiera es que tenga ganas, es la sensación de que tengo que estar alerta porque en cualquier despiste, podría volver de la manera más tonta. Por eso, sigo entrando por aquí a leeros, pero escribo desde el móvil y me da un poco de pereza, por el teclado.

Ayer hice 12 semanas. Ya no me rallo con el "tropezón" de la semana 5, en que me fumé uno y luego rompí el paquete y me puse a llorar, porque lo he integrado en el proceso de dejar de fumar. Llevo 12 semanas y ya está. Es curioso porque sigo en guardia, pero ya me he desacostumbrado a casi todos los cigarros de un día normal. Por la mañana ya no echo de menos el tabaco porque me voy al trabajo sin acordarme y a lo largo del día, raro es el momento en que me acuerde.

Hoy hago mil cigarros sin fumar. Me instalé una aplicación en el móvil que me lo calcula en base a los cigarros medios diarios estimados (que eran unos doce). Es una chorrada pero me hace ilusión, más que los otros aniversarios incluso, porque es como si estuviera dándoles un respiro a mis pulmones de forma tangible. Me imagino los cincuenta paquetes en una montañita que ya no llevo a cuestas y mola :) estoy más ligera sin ese peso. Y la verdad es que ya no lo llevo mal, aunque es como vivir una vida distinta en la que de repente tengo más tiempo.

A veces creo que me estoy volviendo bipolar. Hay días o momentos en los que estoy aceleradísima y convencida de que todo va para alante y genial y que ya soy una exfumadora que se come el mundo porque puede con todo y hay otros en los que me quedo enganchada en un momento de bajón y echo de menos el tabaco y me siento vulnerable...

Hoy vuelvo a las 5 semanas y 4 días sin fumar. Llevaba ese mismo tiempo la noche que me fumé un cigarro y decidí poner a 0 el contador y volver al principio, pero en realidad llevo 11 semanas en el camino. Casi tres meses, un cuarto de año... No me lo creo, se me ha volado el tiempo! En este punto, todavia me acuerdo del tabaco, pero es más llevadero. Hay días en los que ni lo pienso, hay días en los que sólo me acuerdo después de comer o al llegar a casa del curro, pero ya no es la obsesión de al principio.