42 días y animos Blue

Mar, 04/03/2003 - 17:59

La verdad es que llegar hasta aquí no me ha costado demasiado, a ver no me ha costado de manera proporcional al miedo que me representaba el pensar tan solo en dejarlo.
Yo no he tomado nada y el mono físico no me ha molestado en ningún momento, el psicológico es el que a veces molesta un poco, pero también pienso si es nuestro mismo coco, porqué no podemos con él? Donde está el problema?
He pasado estos días como en un sueño, con ilusión cada día renovada. Un poco peor los fines de semana, sobretodo cuando estoy sola.
He descubierto que se tiene que buscar todas las actividades posible para olvidar el tabaco, mantenerse ocupada el mayor tiempo posible y si puede ser que no siempre se puede, en cosas que una disfrute.
Cada semana voy a bailar Country, y este era uno de los lugares que más asociaba con el fumar y más imposible se me hacia pensar en no hacerlo.
Pues curiosamente es un lugar en el que no pienso para nada en fumar y en cambio cuando estoy en casa, sola, teóricamente relajada es cuando pienso más en el tabaco.
De todas formas no es que piense que me apetece un cigarrillo, solo pienso en él y ya está.
Lo mismo me pasa cuando me despierto cada día justo antes de abrir los ojos pienso en el tabaco, pero lo bueno es que pienso: Ah que bien ya no fumo.
Lo cierto es que con el paso del tiempo se va perdiendo esa motivación tan fuerte de los primeros días, te vas sintiendo menos especial que al principio y más insegura.
Pero luego te miras al espejo y te ves esos dientes mucho más blancos y ese cutis mucho más luminoso, respiras profundamente saboreando cada brizna de aire que entra libremente en tus pulmones, hueles la lluvia, el azahar y los limones que aún están en el árbol del vecino, el olor a bebé y las sabanas recién lavadas.
Disfrutas de cada momento, de cada lugar se permita o no fumar porqué no te importa!!!
Te sientes que eres más libre, más maduro y que estás consiguiendo algo que muy pocos consiguen o que tan siquiera se atreven a intentar.
He aprendido mucho de mí misma, me he prestado atención cómo nunca la había prestado, he aprendido a cuidarme mucho más y a pensar en mí y he vuelto a respetarme.

Pero de vez en cuando ataca la bestia, y pensamientos como: podría fumar uno o dos al día disfrutándolos y eso no hace daño....., Los viajes no serán lo mismo,.... como voy a hacerlo en los exámenes...., que pasará si tengo un problema serio en mi vida.....,podría fumar el fin de semana,.....
Solo son flashes, estos y otros que no sé ni como explicar pero si en seguida cambio el pensamiento en algo positivo o bonito para mí, se deshace en seguida o al contrario en pulmones negros y personas enfermas por el tabaco, en tener que volver a gastar dinero para envenenarse lentamente...

Otra cuestión es la del tiempo, el tiempo que inviertes en el vicio, el tiempo en ir a comprar es muchísimo al cabo de la semana y ya no hablemos en el tiempo para buscar en horas intempestivas o festivos algún lugar abierto para conseguir la droga. El tiempo perdido fumando, por que muchas veces se pierde porqué es incompatible con realizar otras actividades, cada vez era menos porqué había llegado a fumar con el cigarro en la boca pelando patatas, tendiendo la ropa y manchándola muchas veces y en caminatas en la montaña.
Me había quemado los labios, los dedos y las pestañas.
Pero la prueba más increible de mi idiotez es seguir fumando teniendo el riesgo de sufrir un ataque de asma detrás de otro, tener que llevar el paquete de tabaco, el mechero y el ventolín para no ahogarme, enfermedad que ya hace unos años me había causado el tabaco.
Ahora me da vergüenza.

Un beso para todos que sin vosotros no lo hubiera conseguido.
Blue cariño animate que en el fondo todos tenemos nuestros malos momentos y cada uno los pasa a su manera y sobretodo gracias por la sinceridad y el aire fresco que ha entrado contigo en este foro.
NUNU